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No disimulan su vil servilismo
Los socialfascistas españoles perpetúan su larga tradición de mentiras sobre el papel del Ejército español en el extranjero
Viernes 14 de noviembre de 2008, por ER. Barcelona
El Secretario de Estado para la Unión Europea, el socialfascista y renegado comunista Diego López Garrido ha manifestado no hacer «elucubraciones» sobre un futuro aumento de las tropas en Afganistán «hasta que Obama asuma la presidencia». Entonces llegará el momento de concretar el aumento del contingente de acuerdo con la capacidad militar española.
López Garrido planteó el sofisma de que España exigiría que la comunidad internacional afrontase una revisión a fondo de la estrategia en el país afgano. Pura cháchara ideológica, pues es de sobra conocido que el Imperio Norteamericano es capaz de conseguir los avales internacionales necesarios para hacer que la ONU o cualquier otro organismo secunde la estrategia que mejor convenga a sus intereses.
El PSOE cuenta ya con una larga tradición de mentiras y ocultaciones ideológicas en cuanto a las misiones que el ejército español lleva a cabo en el exterior, empezando por las estrategias para conseguir el ingreso en la OTAN continuando con el seguimiento de las directrices de Bush padre en la Iª Guerra del Golfo Pérsico.
Los socialfascistas —socialistas de nombre, fascistas de hecho— bien podrían ser llamados también pacifascistas —pacifistas de nombre, fascistas de hecho— porque fascista resulta ocultar las misiones del ejército, disminuir su capacidad operativa, no reconocerle sus méritos de guerra, ponerlo al servicio de segundas potencias extranjeras y encima hacerlo en el nombre de la Paz Universal, el Progreso o cualquier otro timo metafísico.